¿Qué chucha es documentación?

Por Cucho

Siempre nos preguntamos y nos preguntan ¿Qué mierda es bibliotecología? Cosa que muchas veces no somos capaces de esclarecer del todo. Pero se han preguntado ¿que es documentación?

En mi mesa favorita de Cachos's Bar y acompañado de mi estimado Tito Parra, surgió la discusión del significado de DOCUMENTACIÓN. Él le daba un significado periodístico, a lo cual yo insistí en que su uso como palabra era incorrecto, porque en nuestra profesión esta palabra hace referencia a una ciencia o una disciplina si se quiere. Esto ya hace más de un año atrás, en los albores de Campo 500.

Entre cerveza y cerveza surgió el desafío de tratar de explicar qué es la Documentación, y también en lo que se refiere a la relación con la Bibliotecología y explicar el por qué nuestra carrera se llama Bibliotecología y Documentación. Además de tratar de diferenciar ambas disciplinas y aún así relacionarlas. Aunque dejo constancia de que para la elaboración de este artículo he utilizado literatura de corriente española, la que puede diferir de las corrientes anglosajonas, germanas y de mi querida y añorada U.R.S.S. En donde también han tratado el tema en discusión.

Reconociéndome ignorante sobre la materia en cuestión, me lancé a investigar, y llegué a la conclusión de que para explicar la definición sobre una materia tan compleja primero era necesario hablar sobre un hombre. Hablar sobre una de las mentes más brillantes del siglo pasado y de insospechada repercusión en el futuro. Me refiero a PAUL OTLET.

_

_

Paul Marie Ghislain Otlet nació en Bruselas, Bélgica un 23 de Agosto de 1868 proveniente de una acaudalada familia industrial. Fue educado por los jesuitas en París y Bruselas, de la cual puede provenir alguna cercanía por las humanidades más que por los negocios.

En 1886 ingresó a la universidad de Lovaina donde sus intereses se basaron en los estudios filosóficos, científicos y sociales. Intereses que se ven en palabras del propio Otlet: Cierto gusto por los liberal... estudios de la realidad; Una mente sintética; Preferencia por la literatura y la elocuencia; Rechazo de lo práctico, cierto escepticismo por la acción; Horror a enamorarse de la ley.

En 1890 se gradúa de abogado, se casa y se dedica a los negocios. Debido a que ninguna de las tres cosas era de su agrado, en 1891 comienza a trabajar con Henri La Fontaine, con quien explotara su amor por la bibliografía y crearán las grandes obras que Otlet le regaló al mundo.

Otlet se había obsesionado con la idea de clasificar todo el conocimiento humano producido y por producir, para lo cual decidió crear junto a su inseparable amigo La Fontaine el Instituto Internacional de Bibliografía Sociología (1893) el que un año mas tarde se llamó Oficina Internacional de Bibliografía Sociológica, Economía Social y Legislación Estadística. Por diferencias de cómo clasificar el conocimiento, sus colaboradores le llevan a cambiar su nombre por el de Oficina Internacional de Bibliografía, que era de carácter local, también creándose el Instituto Internacional de Bibliografía de carácter global. Las distintas oficinas de bibliografías dieron paso para que en 1938 se concretara la Federación Internacional De Documentación (FID), cuya sede se encuentra en La Haya.

Pero el conflicto de cómo clasificar el conocimiento era constante entre él y sus colaboradores, todos connotados científicos y pensadores de la época, por lo que no lograban ponerse de acuerdo. Entonces Otlet decidió contactarse con uno de nuestros viejos amigos, el señor Melvil Dewey quien se encontraba desarrollando la clasificación decimal, cosa que también había sido propuesta por Otlet en 1876. Otlet decidió entonces escribir a Dewey para solicitar su autorización para la traducción al francés del Sistema de Clasificación Universal, a lo que Dewey respondió positivamente.

Si bien en un principio Otlet utilizo la CDD y aún a la muerte de Dewey siguió trabajando con el hijo de este. Eran tantas las correcciones que le había realizado al Clasificación Universal Dewey, que finalmente publicó su propio sistema de clasificación, que se consideraba menos engorroso que el CDD. Así alrededor de 1904 se comienza a publicar paulatinamente las CDU, de amplio uso en Europa Según Otlet, “El Repertorio Bibliográfico Universal comprenderá el inventario clasificado por materias y autores de los libros y publicaciones aparecidas en todos los países, en todas las épocas y sobre todos los temas”. Ya en 1898 Otlet pensaba en crear el catálogo de publicaciones y materias más grande del mundo, que contendría todas la información sobre las obras publicadas en todo el mundo y en cierta medidas lo logró, pues sin los grandes software y computadoras actuales logró clasificar 15.000.000 de fichas con una data base flexible y aunque era rudimentarios, no era lento y se le puede considerar el primer sistema hypertext/hypermedia, y también el primer catálogo universal.

Y por qué cito a Otlet para hablar de documentación. Pues por que Paul Otlet es reconocido mundialmente como el padre de la documentación, ya que en 1934 publica el Tratado de Documentación, donde expresa que la vieja bibliotecología debe dar paso a una nueva ciencia, la documentación, donde el libro deja de ser sólo libro y surge el documento. Otlet, atento a su tiempo, predice que las imágenes, textos, sonidos se fusionarán en uno solo, serán un solo documento, que contendrá información. Además sostiene que el hombre solicitará la información a una gigantesca fuente donde otros la seleccionarán y se la enviarán en forma instantánea. Fue Otlet quien predijo las nuevas formas de comunicación como la internet.

Ya la simple catalogación y clasificación no sirven, y deben dar paso a la documentación, que analizará el recorrido de la información desde su creación intelectual a la elaboración material, su descripción y la crítica, su puesta en circulación, su intercambio y conservación, su uso y finalmente la destrucción de la misma para dar paso a un nuevo conocimiento.

Pero Otlet es aún más adelantado a su tiempo, demostrado cuando predijo las nuevas formas de la tecnología, además de predecir también lo que conocemos como globalización, pues mucho antes que Mcluhan acuñó el termino “Ciudad Mundial”, concepto al cual agregaba que debía ser un espacio de intercambio no solo comercial, sino que además debía promover la paz mundial.

No debemos por ningún motivo olvidar que es Otlet el que en 1927 escribe la carta de la Sociedad de las Naciones, lo que da paso para la creación de la ONU. Explicando además que debe existir una moneda mundial para mejorar las relaciones internacionales y se debe estandarizar las medidas de peso y longitud.

Habiendo presenciado la primera guerra mundial es él quien propone la PALAIS MUNDIAL, que sería una utopía de confluencia internacional para la paz, que contendría un museo internacional, una biblioteca internacional y el instituto bibliográfico internacional, además del repertorio bibliográfico universal, además de una enciclopedia de la documentación y una gran universidad internacional. Aunque el proyecto fracasó, surgió nuevamente con el Mundaneun (1924) del cual Otlet decía: “Es un monumento erigido con la unión de todas las fuerzas, dedicado a la inteligencia, que será por otra parte y sobre una base universal, un museo universal, una biblioteca internacional, una universidad internacional y que estará realizado por la unión internacional de asociaciones”.

Así Paul Otlet es un visionario, un hombre adelantado a su época que predijo las complejas relaciones internaciones, que predijo las nuevas tecnologías, que predijo la internet cuando hablaba de “La biblioteca radiada y el libro televisado”, que se adelanto a la OCLC, que hablaba de paz mundial y de ecología cuando surgían las industrias y las guerras y que hoy los bibliotecarios documentalistas ni siquiera tienen idea.